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Álbum de la semana: Cigarettes After Sex - “X’s”

Cantando sobre el amor perdido, Greg González entrega un tercer álbum de dream pop catártico que no se desvía de su refinada estética.

Ahora que ha encontrado la fórmula ganadora, Greg González se ciñe a ella. Tras un breve periodo con una banda de heavy metal, años tocando en salas vacías y un EP grabado en 2012 en el hueco de una escalera de la Universidad de El Paso con sus tres antiguos compañeros de banda, el tejano se presenta ahora ante salas llenas gracias a una identidad clara: una estética ahumada, voces andróginas inspiradas en Françoise Hardy y un sonido que recuerda a Mazzy Star. Pero, sobre todo, el amor está en todas partes.

Con Cigarettes After Sex, nombre tomado prestado del ritual de una de sus antiguas citas, Greg González plasma los recuerdos de sus amoríos frustrados, antes y después de la relación. “Es lo único que me da ganas de vivir o de morir”, admitió en 2017, cuando salió su primer disco. “Quería hacer un disco que se adentrara lo máximo posible en el terreno y no se alejara de su temática”. El cantautor sigue dejando constancia de sus torrenciales amoríos en Cry, dos años después, y ahora en X’s, que exhuma en diez temas una única relación de cuatro años.

Escrito, como él mismo reconoce, en el punto álgido de su dolor, en 2020, este nuevo álbum recorre sus inicios entre las sábanas (X’s) hasta las inevitables despedidas (Ambien Slide). “El disco es brutal, sinceramente”, admite González. “Podría sentarme a hablar con alguien sobre la pérdida, pero no sería suficiente. Tengo que escribir, tengo que cantar, tengo que tener la música, y entonces podré empezar a analizar y aprender. O simplemente revivir, en el buen sentido de la palabra”. Está todo el sabor de los dos álbumes anteriores, el gusto por el espacio, la reverberación, la guitarra lánguida respaldada por una batería cloroformada, letras sencillas con imágenes fuertes y estribillos embriagadores (Dreams From Bunker Hill, Dark Vacay). Pero también hay ralentizaciones más ochenteras y ensoñadoras cuando el ritmo de su dream pop downtempo se acelera (Holding You, Holding Me, Baby Blue Movie).

De nuevo en el papel de productor, Greg González optó por grabar X’s en un dormitorio de su casa en las estribaciones de Hollywood, en Los Ángeles, adonde se había mudado con su ex antes de la pandemia. Entre 2021 y 2022, grabó allí seis sesiones en directo junto a dos miembros veteranos, Jacob Tomsky (batería) y Randall Miller (bajo), además del recién llegado Jeff Kite a los teclados. De ahí, sin duda, su exacerbado y paradójico romanticismo, a la vez íntimo y cinematográfico, que infunde gran parte de este nuevo disco construido sobre un corazón roto.